La fauna y la flora que alberga es abundante y está constituido como uno de los ecosistemas más representativos de la provincia del Chaco.
Creada en 1978, esta reserva natural provincial posee en sus 8.633 hectáreas una profusa vegetación boscosa, en la que abundan los quebrachos blancos y colorados, itínes o carandás, algarrobos, espinas corona, guayaibís blancos y mistoles, entre otros, combinados con cardos, camalotales, zonas de abras, pampas, esteros y bañados. Para los amantes de los animales y quienes buscan destinos de avistajes de aves, este parque ofrece una variedad extraordinaria de especies, como el chancho moro, chancho gargantillo, zorro, guazuncho, oso hormiguero, tatú mulita, puma, pájaro carpintero, cardenal, tordo y loro hablador, entre muchas otras aves. Hay también una importante presenci de reptiles y ofidios como las boas, yarará, víbora de la cruz y cascabel. El Parque ofrece al turista l0 hectáreas de camping, senderos peatonales y vehiculares interiores, carteles indicadores, agua potable y luz eléctrica, parrillas, baños. No cuenta con proveeduría, por lo que se recomienda llevar todo lo que se requiera para comer y beber. Esta reserva es además el escenario de llegada de una de las mayores peregrinaciones a caballo, la "Cabalgata de la Fe", un evento que convoca a cerca de 5.000 jinetes de distintas localidades y de provincias vecinas localidades aledañas, quienes se reúnen en Quitilipi para dirigirse al Parque, recorriendo un trayecto de 75 kilómetros por la ruta provincial Nº 4. Esta peregrinación se realiza en abril y se recorre en dos etapas, culminando en la Reserva con el oficio de una misa en Acción de Gracias a la Santísima Inmaculada Concepción de la Virgen María (patrona del Chaco) y San Pantaleón (Patrono de los enfermos) para luego dar paso al festival popular. El ingreso y campamento en el parque es gratuito.